domingo, 21 de julio de 2013

Nueva colección

Mes de julio, mes de rebajas por excelencia. Siempre me he considerado más un comprador de rebajas que de temporada, y es algo de lo que no me avergüenzo, sino todo lo contrario. Es cierto que comprar en rebajas siempre supone ir un poco por detrás en cuestiones de moda pero, sinceramente, me importa bien poco ese retraso de tres meses, seis meses o un año porque la moda te la marcan, sí, pero al final la decisión es de cada uno. Prefiero vestirme por mucho menos dinero y pensar que mi moda la marco yo, más o menos, porque también es cierto que en rebajas hay menos donde elegir y muchas veces hay que conformarse con lo que le queda a uno, que en ocasiones incluso da la casualidad de que coincide con lo que se iba buscando.

Y ahora, después de todo este rollo, vamos al título de esta ventana: nueva colección. Hasta ahora no recuerdo asociar esas dos palabras sino con la ropa que antes o después compartía espacio con la de rebajas, pero que pertenecía ya a la nueva temporada por llegar (en el caso de las rebajas de verano, la nueva colección se refería a la temporada de otoño, como es lógico). Sin embargo parece que eso ha cambiado, y ahora intentan colocarnos ropa de temporada, a precio de temporada, en plenas rebajas. Y me parece estupendo... bueno, no. ¡Qué narices! Para nada me parece estupendo. Ya me parecía una sobrada que antes de llegar agosto, en plena ola de calor, estuvieran colocando los jerseys, camisas de entretiempo, pantalones largos, parcas, abriguitos... lo cual significaba que cada vez había menos sitio para encontrar el chollo que siempre iba buscando, como para encima tener que dejar sitio también a ropa de temporada a precios de antes de las rebajas. Menuda gracia, oiga. 

Aquí se trata de reinventarse o morir. Dentro de poco decidirán que las rebajas duren un día.... ¡qué estrés! Y claro, las rebajas de esa nueva colección ¿para cuándo, para el año que viene? Quizá con el auge del fenómeno outlet ni siquiera haya ya rebajas. ¡Oh, my god! ¿Qué será de mí?

Por favor, señores de las tiendas, devuélvanme mis rebajas de toda la vida, aunque duren algo menos...

(Por cierto, este año las rebajas me han resultado la mar de provechosas, a pesar de la nueva colección)